Reflexión: Ayudar… ¿o complacer?.
Solemos caer en la trampa de creer que es siempre sano complacer a las personas que queremos. Es más, ¡así le demostramos nuestro amor!. Pero, ¿no sería más interesante ayudarles, entenderles y respetarles?, recordemos que amar es soltar, dejar ser,… no retener. Cuando complacemos a alguien corremos el riesgo…